Este artículo examina en detalle la cuestión de la supuesta disminución de la calidad del semen. La motivación para realizar una reevaluación detallada en este momento es triple: 1. El posible impacto de un deterioro real de la calidad del semen sobre la fertilidad humana resulta prioritario para el bienestar de la humanidad; 2. los gobiernos han comenzado a elaborar un legislación "antidesestabilizadores endocrinos", que se basa, en parte, en visiones parciales de los datos publicados acerca de la calidad del semen; y 3. la confusión y desinformación sobre la calidad del semen sigue estando muy extendida tanto entre la población general como en los círculos profesionales.