Los antimicrobianos resultan útiles para el tratamiento empírico y definitivo de las infecciones de los pacientes quirúrgicos. Además, son preparados fundamentales para la profilaxis antimicrobiana perioperatoria. La selección y el uso correctos de estos medicamentos constituyen una pericia fundamental del cirujano. Pese a la multitud de efectos beneficiosos de estas sustancias, también poseen efectos adversos ocasionales y no deben aplicarse de forma indiscriminada.