Camino. Oleaje. Viento de abril. Mundo. Yolombó. Mapiripán. Bojayá. Macayepo. Cumaribo. El Salado. La Horqueta. Urrao. Jamundí. Remedios. Trujillo. Ciénaga. El aro. La llorona. Pablo Cepeda, creador de insomnios. Israel Menunga, panadero. Thelonius Monk. Gabriel Siria, recolector de vidrios. El cojo Barrios, guardagujas. Amílkar Espitia, el herrero. Abraham, relojero. El mariscal Victorio. Isaías Ronderos, el sastre. Víctor suárez, el guerrillero. Esperanza Arévalo, la actriz. Sandro del Musgo, el carcelero. Lorenzo Campos, el asesino. El ahorcado. El cayado del ciego. El falso llanto del granizo. Reflejos. Retrato del olvidado. Monólogo de Joaquín Ronderos. Oruga. Una larga cosecha entre las aguas. Niebla. Sombra en los postigos. Tratado del cuerpo. Historia del agua. Señales. Balada del deseo. Salvedad. Tarros de leche. Ardilla roja. Arena suelta que dispersas con tu mano. El comienzo de los frutos. El reloj. La ventana. La puerta. Sobre pájaros, árboles y sombras. Gelman por Hellman.

“A Hellman Pardo no le hace falta ver la sangre para reconocerse en la proximidad de la herida. En la profundidad del poema, se afecta al pulsar el territorio del desastre”. [Mery Yolanda Sánchez]